Elaboración:
Cortamos la carne en dados no muy grandes y, tras salpimentarla, la freímos en aceite, dándoles apenas un vuelta y vira. La retiramos y reservamos en otro recipiente.
En el mismo aceite, preparamos una fritura con la cebolla, los tomates y el pimiento, todo troceado, aunque no excesivamente fino. También freímos los ajos lasqueados.
Cuando esté casi hecha esta salsa, le ponemos el laurel, el tomillo y, sacando la sartén del fuego, el toque de pimentón. Volvemos a colocar cobre la llama y rociamos con el vino y un poco de agua. Unos segundos después, echamos todo esto sobre la carne y picamos, encima, la zanahoria en lascas.
Cuando haya dado un hervor, mojamos todo con un chorro generoso de coñac (se puede prescindir de este detalle que, sin embargo, aconsejamos).
Rectificamos de sal y dejamos seguir haciéndose el guiso. A última hora, sumamos al conjunto las papas peladas, cortadas en dados del mismo tamaño aproximado que la carne y ligeramente fritas en otra sartén. Además.. Las papas se pueden poner crudas, aunque, claro, en este caso, hay que hacerlo antes. En algunos lugares de las Islas, a este preparado se le agregan, al final, unas uvas pasas. Va en gustos.
Ingredientes:
Un kilo de carne de res (si es ternera, mejor).
Una cebolla grande.
2 tomates medianos.
Media cabeza de ajos.
Un pimiento hermoso.
2 hojas de laurel.
Una ramita de tomillo.
Un vaso de vino blanco seco.
Media cucharada de pimentón.
Un par de zanahorias.
Agua.
Coñac (opcional).
Un kilo -o poco menos- de papas.