LOURDES: UN FIN DE SEMANA PARA RECORDAR, EN EL PROGRAMA “AVE MARÍA”
Los picos de las grandes moles Pirenaicas aún tenían un límpido manto de nieve que se iba derritiendo en torrentes y cascadas magníficas señalando la llegada de la primavera. El cableado de los arrastres y las sillas para el deporte del esquí, ahora quietas, parecían añorar el calor de los deportistas que, horas antes, aún disfrutaban del deporte blanco, que este año se alargó más.
El paisaje por el Pourtalet atravesando los Pirineos es distinto, las rocas oscuras de la cordillera se ven dibujadas con trazos blanquísimos, como pieles curtidas de vacas, y retienen la nieve invernal que tanto disfrute ha proporcionado a los cientos de miles de amantes de este deporte, tanto en las pistas francesas como en las estaciones españolas de Formigal, Candanchu, Panticosa...
La carretera-culebra nos sorprende con panoramas fantásticos, donde la imaginación juega con la realidad un importante papel. Los verdes valles franceses muestran de su ganadería las hermosísimas vacas y los poderosos caballos que, en ese momento me acercaban mi niñez mas querida, como el recuerdo de la yegua “Chata”, francesa, que, aunque se denomine de Tarbes, su raza no es autóctona pues tiene su origen en Noruega, siendo muy apreciada por el empaque la fuerza y el poderío. Me conmovió recordarla al ver las pobladas crines y la larga cola de los caballos rojizos en la pradera.
Un fin de semana que auguro será para el recuerdo porque la oferta de El Corte Inglés y Renfe con los autobuses de la empresa Alosa, llamados “María”, forman un trío empecinado en que la experiencia, comenzada hace cuatro años, sea grata para cuantos se acerquen a contratarla. Con el formidable tren Ave, que va y viene casi por toda España, han coordinado el ferrocarril más rápido con los confortables autobuses que esperan a pie de estación en Huesca, si vienes de Madrid en Ave y te dejan a la puerta del hotel contratado para disfrutar del programa “ AVE MARIA “, impulsado por El Corte Inglés. Todos los viernes, desde el 10 de Abril al 30 de Octubre. De otros lugares de España también funciona el programa “AVE MARÍA”, con las oportunas conexiones, cuya información puede obtenerse en El Corte Inglés.
Pasados los Altos Pirineos Franceses, en el distrito de Arles, a orillas del rio Gave de Pau, se encuentra la ciudad de Lourdes, donde 17.000 habitantes viven dedicados a la Virgen del Rosario en la fabricación de objetos religiosos como industria principal, ya que las multitudes que hasta allí se desplazan llevando la fe en los rostros y en la palabra la emoción del “milagro”, abarrotan los Santuarios y las calles que muestran, de mil maneras en los objetos, la devoción que les congrega, los fines de semana, principalmente, para saludar a la Inmaculada Concepción, que así se identificó la Virgen vestida con túnica blanca, ceñida por banda azul, con una rosa de oro en cada pie y la mirada hacia el Cielo, al aparecerse a la pastorcita Bernardette Soubirous, de catorce años, el 11 de Febrero de 1858. Desde esta fecha, cumplido el deseo de la Virgen de que se hiciese una capilla en su honor, en la roca de Massabielle, donde está la Gruta de las Apariciones, ríos de peregrinos han llenado la enorme plaza de los Santuarios buscando cada corazón su consuelo.
Fueron dieciocho las apariciones que arrebataron en éxtasis a Bernardette, haciéndola incombustible al fuego y a las múltiples pruebas que, para creer sus afirmaciones sobre la Virgen, exigieron, clérigos, prelados, científicos y médicos hasta comprobar que el relato de la niña sobre lo que veía y le sucedía era la verdad venida del Cielo, para convocar a la oración rogando por los pecadores. Señaló la Virgen a la vidente que bebiera y se lavara con el agua surgida del manantial y así lo vienen haciendo la infinidad de enfermos que llegan hasta allí logrando curaciones, algunas instantáneas, a las que no se encuentra explicación natural: El agua no tiene especiales propiedades medicinales y las curaciones tampoco tienen explicación en la ciencia médica; es la Virgen quien obra los milagros.
Bernardette murió en Nevers como Hermana de la Caridad, en 1879, y fue canonizada por Pio XI, en 1933. La magnífica Basílica del Rosario sigue mostrando en su fachada principal los bellísimos mosaicos que tantas cavilaciones han producido a sus artistas para salvarlos de la gran humedad de la piedra. Por la puertas de la Vida y de la Luz entran y salen de la Basílica los peregrinos, bajan la gran escalinata, recorren en Vía Crucis y procesión de antorchas la gran explanada de la Basílica que acoge a los fieles que entran por las puertas de San José o de San Miguel y quieren dirigirse a otra Basílica, la subterránea, que puede acoger hasta 25.000 fieles y en donde se venera la reliquia de un trocito de la túnica que llevaba el Papa Juan Pablo II cuando fue atacado en la Plaza de San Pedro por un infiel turco. La Basílica tiene la forma del pez de los primitivos cristianos, invertido, de ahí las nervaduras y columnas que recuerdan su esqueleto. El espacio logrado es impresionante para que hasta allí puedan llegar los enfermos más discapacitados, que se cuentan a millares.
Dentro del mismo paquete turístico, se pueden ver cosas interesantes en los alrededores de Lourdes, como la ascensión al Pic del Midi -unos 3.000 metros de altura- subiendo en funicular para gozar de un paisaje increíble, casi sobrepasando los picos. En la cumbre se visita el Museo del Observatorio Astronómico, donde por vídeo se asombra el visitante ante las dificultades que para su construcción tuvieron que vencer seres irrepetibles, en tiempos difíciles y carentes de medios para una obra tan extraordinaria. La visita puede alargarse con hospedaje y disfrutar del Observatorio durante toda la noche, si así se desea.
Hay otras excursiones posibles a preciosos parques. Mi grupo visitó un bonito Zoo donde se muestran los animales en un ambiente idóneo y cercano al visitante, con senderos cómodos y fáciles para venir en familia con el disfrute de los niños asegurado por la cercanía y variedad de los pobladores del recinto, tal los linces, los osos, el leopardo, las marmotas, las saltarinas nutrias y toda clase de aves. Una modalidad de regreso es hacerlo en bicicleta, por la vía verde del Gave, unos diez kilómetros, para tomar el autobús de regreso a Lourdes.
Para otra visita dejo la Fortaleza que domina la ciudad. La leyenda atribuye un asalto de Carlomagno a este castillo llamado Mirambel, que ocupaba un emir musulmán.
Los hoteles que he disfrutado me han proporcionado un sueño placentero entre atenciones de bienvenida en el Hotel Miramont, junta al río, y me han sorprendido, en el Hotel Paradis, con una capacidad de 300 habitaciones y numerosos salones para cuantas actividades se requieran. Es de destacar, la variedad de su gastronomía, la bonita presentación de suculentos y refrescantes platos y su plantilla compuesta de un personal cualificado y siempre atento con el cliente.
Bajo la batuta de Rafael Moreno, que vive el programa “AVE MARÏA” poniendo el alma y su gran experiencia, nada puede fallar y el éxito está asegurado.
He regresado a Madrid con el corazón rebosante de amor a mis semejantes y el deseo de la paz más duradera para el mundo. La Virgen ya lo sabe: Volveré.