El Turismo de hoy y sus perspectivas

Sumidos en la imponente tragedia que está azotando al mundo, nos encontramos confinados obligatoriamente alrededor de nuestro museo de recuerdos turísticos que van, desde el Torito de Pucará, peruano, hasta el llavero de la Torre Eiffel, fabricado en China, pasando por las espuelas de plata, obsequio de la Corporación de Turismo de Chile.

Esta curiosa – hay que llamarla de alguna manera – situación, nos ha traído a la mente los miles de buenos recuerdos que nuestra actividad nos ha producido promocionando las bondades que produce el movimiento de personas en el mundo, o sea, el turismo.

Son todo un cúmulo de vivencias que se sellan como experiencia y que, unas y otras, nos han servido para sembrar ese inmenso campo de ex alumnos que nos contactan desde los más remotos lugares de nuestra América, ese paraíso desconocido para nosotros cuando ya ostentábamos un par de reconocimientos mundiales por nuestra impenitente labor educativa alrededor del turismo que no hemos abandonado  hasta este mismo momento. Perú, y hasta su propio Presidente de la República pueden dar fe de esto.

Ante este escenario, vamos a publicar varios artículos reproduciendo lo que en el año 1973, era nuestra lección terminal de unos cursos turísticos encuadrados bajo el titular de “I Seminario Nacional de Cultura Turística de Brasil”  celebrados en las ciudades de Río de Janeiro y Sao Paulo, impartidos con ocho profesores desplazados desde las Islas Canarias, de nuestro propio centro de estudios.

Comenzamos con el primero de ellos, recomendando especialmente a nuestros distinguidos lectores, tener en cuenta que esto decíamos hace 48 años atrás. Ha llovido algo.

Comenzamos:

“PRINCIPIOS SOBRE EL TURISMO INTERNACIONAL Y SUS FACTORES DE DESARROLLO”

 “No existe ninguna duda de que el turismo ha llegado a ser uno de los fenómenos dominantes y especialmente característicos de la sociedad moderna, especialmente en su aspecto del bienestar.

Llegamos ya así, a la cuestión de la expansión que ha registrado el turismo, expansión que contribuye igualmente un potente indicio de su desarrollo, desde el final de la segunda guerra mundial, en efecto desde 1960 el turismo ha adquirido un volumen que deja atrás todas las proporciones anteriores.

Actualmente se puede determinar de una manera más exacta la característica exponencial de su crecimiento, especialmente en lo que concierne a la frecuencia de los viajes, y después proceder a analizar sus orígenes, para finalmente examinar las perspectivas de desarrollo a las que podemos llegar.

El movimiento que desde 1950 ha animado al turismo internacional desde el punto de vista cuantitativo, es decir principalmente en su frecuencia, puede clasificarse con toda justicia de verdadera expansión.

Si las palabras “sensacional”  o “enorme” no hubieran adquirido un sentido deformado como consecuencia de su empleo abusivo en numerosas e inoportunas ocasiones, podían utilizarse para caracterizar la comprobación casi increíble en la frecuencias turísticas a escala mundial, a pesar del nivel ya muy elevado en los últimos años, en los que van desde 1960 a 1969.

El hecho de que, con la única excepción de Oriente Medio, la expansión haya continuado con su movimiento, se deducen de las estimaciones de la U.I.O.O.T.(Unión Internacional de Organismos Oficiales de Turismo)

Resulta de lo que precede, que durante los últimos diez años, la extensión de la frecuencia europea marcó “grosso modo” la del conjunto del mundo.

En lo que respecta al Oriente Medio, en este mismo periodo se ha triplicado ampliamente, salvo un retroceso en 1970, por razones de todos conocidas (Septiembre Negro). En África y en América se situó por debajo de la media global, mientras que en Asia y en Australia, al quintuplicar su volumen, alcanzo el más alto nivel.

ASIA Y AUSTRALIA UN CASO ÚNICO

Esta situación, y muy especialmente el aumento sorprendente de los viajes en Asia y Australia, permiten ya observar que una expansión diferenciada se ha manifestado igualmente, según se trate de regiones turísticas en vía de desarrollo o de regiones turísticas ya establecidas. Así, Asia y el Oriente Medio pueden considerarse como zonas en vía de desarrollo; ambas registraron en el decenio 1960 -1969, un aumento de la frecuencia mucho más pronunciado que el de Europa o América.

Un estudio más profundo, efectuado por países, demuestran, de una manera más acentuada, esta diferenciación de la expansión de los viajes en los países turísticos tradicionales, por una parte, y en los países en vía de desarrollo, por otras.

Una expansión turística de semejantes proporciones no se puede comprender más que tratando de descubrir sus orígenes. Esto es lo que vamos a intentar ahora y que al mismo tiempo dará ocasión de ocuparse de otros elementos del desarrollo registrado.

En principio se impone una sistematización de los factores de la expansión que diferencia los factores exógenos, es decir que actúan de exterior del turismo, de los factores endógenos, derivados del turismo en sí mismo o los que actúan desde dentro del fenómeno turístico. El resultado consistirá en la formación de grupos de diversos factores, particularmente dentro del cuadro de las más complejas motivaciones.

EL TURISMO QUE VIENE

Los factores procedentes del exterior que más han hecho sentir sus efectos sobre la expansión y la han animado, son:

El aumento de la población, la prosperidad económica.

El mejoramiento de los medios de comunicación.

La liberación del tráfico de personas.

Y por último la influencia creciente de los medios de comunicación de masas.

Estos factores particularmente suscitan diversas observaciones.

En primer lugar vamos hablar sobre el aumento de la población.

En general se tiene tendencia a subestimar el impulso que confiere a la frecuencia turística y en consecuencia al turismo en sí mismo el elemento demográfico, constituido por el constante aumento de la población. Naturalmente el aumento de la población no corresponde a un crecimiento igual de las frecuencias dado que corresponde a regiones que no se toman a consideración para nutrir el turismo, pero por no haberse manifestado en regiones económicas y culturalmente prosperas, ha ejercido una influencia positiva nada despreciable en el turismo y ha contribuido así a la expansión de sus viajes. Así se explica el auge del turismo de los jóvenes. Este auge es el resultante particularmente de hecho de que de 1955 a 1970 el número de jóvenes cuya edad oscila entre los 15 a los 19 años ha aumentado en una tercera parte, pasando de 255 a más de 400 millones. En los estados unidos llego incluso al 50 por ciento, mientras que en la unión soviética no paso del 14 por ciento. Europa registro una elevación del 20 por ciento y en Asia, África y América del sur, los índices oscilan entre el 30 y el 45 por ciento.

ELIMINACIÓN DE LOS TRÁMITES DE FRONTERAS

Liberación del tráfico de personas, mercancías, pagos y capitales.

Si la expansión de las frecuencias en el periodo de la posguerra comenzó virtualmente en 1950, esto se debió en gran parte a la acción de liberación emprendida por la O.C.D.E. (Organización de Cooperación y Desarrollo Económico).

El primer objetivo fijado en el código de confirmación consistió en la franquicia del tráfico internacional de pagos de todas las restricciones que lo entorpecían. A esto vinieron añadirse la abolición del visado de entrada, que es hoy prácticamente una realidad en todos los estados miembros de la O.C.D.E, la facilidad de importancia para los vehículos turísticos de motor, la sustitución del pasaporte por la tarjeta de identidad, teniendo como meta final la abolición completa del pasaporte, la simplificación de los trámites aduaneros, etc.

La U.I.O.O.T. Ha desempeñado un meritorio papel en la puesta en marcha de todas estas medidas de liberación, estas últimas, han alcanzado en conjunto tal punto, que la libertad del tráfico internacional puede considerarse casi completamente restablecida. Sin embargo hay que eliminar todavía ciertas importantes reliquias de dichas restricciones. Para esto es necesario especialmente el interés de los jóvenes turistas, el total apoyo de las organizaciones interesadas y de las autoridades competentes.”