¿Cuándo es mejor reservar un vuelo?
¿Cuál es el mejor día de la semana para reservar un vuelo?
Los precios medios muestran que el martes es el día más barato para reservar un vuelo, con un precio medio de 63 euros. En general, los precios tienden a subir a medida que nos acercamos al fin de semana y las ofertas van desapareciendo, por lo que es aconsejable comprar nuestros vuelos entre el lunes y el miércoles. Por el contrario, el domingo parece ser el peor día para reservar un vuelo, ya que cuesta una media de 69 euros en España.
¿Cuál es la mejor hora del día para reservar un vuelo?
De las investigaciones analizadas se desprende que la hora más barata para reservar un vuelo son las 2 de la madrugada, los vuelos a esa hora cuestan una media de 57 euros. Por el contrario, la peor hora es la 1 de la tarde, que cuesta 69 euros. Aunque la diferencia de 12 euros no es mucha, hay a quien le compensa mantenerse despierto por la noche para encontrar la mejor oferta. En términos generales, es mejor siempre comprar por la noche que por la mañana, los vuelos en la franja que va de las 8:00 h. de la mañana a las 20:00 h de la tarde están en una media de 67 euros, mientras que comprándolos entre las 20:00 horas y las 8:00 horas del día siguiente la media ronda los 63 euros. Una pequeña diferencia de 4 euros.
¿Con cuánta antelación merece la pena reservar un vuelo?
Los datos muestran que, por término medio, los precios de los vuelos aumentan en los días inmediatamente anteriores a la salida, y que reservar entre 5 y 1 día antes del vuelo cuesta de media más que el precio medio del billete. El ahorro se empieza a notar cuando reservamos con al menos 15 días de antelación, llegando a ser de un 10 % cuando se reserva con dos meses de antelación.
El mejor mes para volar
El análisis muestra que enero y febrero son los mejores meses para reservar un vuelo doméstico, con un precio medio de 93 euros. Los dos primeros meses del año son los mejores para volar, dada la altísima demanda de vuelos en diciembre. Les siguen septiembre y octubre como tercer y cuarto meses mejores con unos precios medios de 95 y 103 euros respectivamente. Por el contrario, junio y julio resultan ser los peores meses, con unos precios medios de 144 euros, coincidiendo con los meses preferidos de vacaciones de verano. La diferencia es de 50 euros por trayecto entre el mes más barato y el más caro viajando al mismo destino.
En cuanto a los destinos europeos, enero y febrero también son los mejores meses con unos precios medios de 102 y 126 euros, seguido de septiembre con 134. El peor mes sigue siendo junio con un precio medio de 208 euros, 106 euros de diferencia entre el mes más caro y el más barato. Por último, en cuanto a los vuelos de larga distancia, aunque depende mucho del destino, enero y febrero son los meses más baratos con una media de precios de 600 euros seguidos de septiembre que ronda los 755 euros. De nuevo, el peor mes es junio con 923 euros. Una diferencia de 323 euros.
Por tanto, y aunque era algo que la mayoría ya pensaba, es más barato volar en los meses de temporada baja y en los periodos inmediatamente posteriores a las vacaciones con alta frecuencia de reservas. Los viajeros que prefieren los meses menos populares para las vacaciones se ven recompensados con precios significativamente más bajos.
Conclusiones del estudio:
- El día más barato para reservar un vuelo es el martes.
- El día menos conveniente es el domingo.
- La mejor hora del día para reservar un vuelo son las 2 de la madrugada.
- La peor hora del día para reservar un vuelo es la 1 de la tarde.
- Reservar por la noche es ligeramente más barato que durante el día.
- Reservar con al menos 2 meses de antelación supone un ahorro del 10 %.
- Reservar entre 5 y 1 día antes del vuelo cuesta de media más que el precio medio del billete.
- Los mejores meses para volar son enero, febrero y septiembre. El peor mes es junio.
Encontrar el mejor momento para reservar un vuelo es crucial, también saber elegir la fecha para volar, pero también hay muchos otros trucos para ahorrar en billetes de avión. Los expertos nos muestran algunos de ellos:
1. Comprobar varias veces el precio de un billete de avión
Controlar el precio del vuelo que nos interesa nos permite ver si el precio sube o baja en determinados momentos de la semana o del día.
2. Cambiar el aeropuerto de salida o de llegada
Elegir un aeropuerto diferente o un poco más apartado puede reducir significativamente el precio de un billete de avión. Habrá que comparar cuánto nos supone el transporte desde diferentes aeropuertos a nuestro lugar de destino y si el tiempo invertido nos compensa para tomar la mejor decisión.
3. Revisar las ofertas de última hora
Al igual que reservar con mucha antelación puede hacernos ahorrar dinero, también hacerlo en el último segundo. Normalmente reservar en el último minuto no es ventajoso, pero los vuelos de última hora se ofrecen a menudo a precios reducidos si no se han vendido por alguna razón. Eso sí, nuestra disponibilidad a viajar y a improvisar tendrá que ser máxima.
4. Reservar un vuelo con escalas
Los vuelos con escalas son siempre más baratos. Es aconsejable analizar el tiempo de la escala en relación con el precio ahorrado, ya que si tenemos tiempo o, por ejemplo, no nos dan la habitación de nuestro hotel hasta por la tarde, puede ser un buen negocio.
5. Reservar vuelos con diferentes compañías
Aunque normalmente no lo solemos hacer, y parece que tenemos la tradición arraigada de ir y volver con la misma compañía porque pensamos que al comprar la ida y la vuelta juntas sale más barato, esto no siempre es así y muchas veces sale más económico volar con diferentes compañías y aprovechar las ofertas de un solo vuelo que tienen. Además, puede que al combinar diferentes aerolíneas los horarios nos encajen mucho más y podamos aprovechar los días mejor.
6. Volver desde un aeropuerto diferente al de llegada
Muchas veces, volver desde un aeropuerto diferente al que llegamos sale mucho más barato, todo es cuestión de organizarnos las estancias de nuestro viaje de tal forma que lo acabemos cerca de ese segundo aeropuerto. O reservar el último día para hacer una ruta en la que la última parada sea el aeropuerto de vuelta a casa.
7. Ser flexible
En general, cuanto más flexibles seamos en cuanto a horarios, días o destinos, mejor ya que podremos aprovechar las ofertas especiales. Esto viene bien para todos aquellos que en sus trabajos puedan primero reservar y después pedir las vacaciones.
8. Utilizar buscadores de vuelos
La búsqueda de vuelos en webs de comparación de precios como Jetcost.es ahorran tiempo y dinero en su búsqueda ya que son ellos los que ofrecerán en pocos segundos todos los resultados correspondientes a su búsqueda de forma gratuita. Ellos no cobran comisión a las personas que buscan el vuelo y les redirigen a la página seleccionada con el mejor precio. De igual manera, uno se puede suscribir a sus notificaciones y recibir una alerta con las mejores ofertas de los destinos deseados.