El Turismo idiomático en pañales
Qué desolación me produce que este nicho de mercado, donde la estancia media es de 4 semanas; muy por encima de la de un turista tradicional que es de 7 días; hasta el día de hoy, ha tenido un bajo desarrollo en nuestro país y a pesar de todo, sin embargo tiene un prometedor futuro; si se despliega adecuadamente esta potencial actividad
Está claro que tenemos que aprender de los que dominan esta esfera formativa que son los británicos, americanos, alemanes y franceses. Llevamos unas cuantas generaciones siendo clientes pero no anfitriones con el debido éxito. Siendo conscientes de las enormes posibilidades sin explotar que tiene España. Esta especialización puede aportar, un algo más, al segundo destino turístico más importante del planeta.
En este terreno, salvo honrosas excepciones, casi todo está por hacer. A nivel nacional representa solo el 0,3% de los turistas que recibimos. ¿Pero que es el Turismo Idiomático? Es el que engloba todo tipo de turismo que motiva el desplazamiento de extranjeros hacia España, (en este caso) para “aprender el idioma”. A pesar, de que en nuestro país no le hemos prestado la importancia que se merece, los crecimientos anuales rondan el 5%. Los principales destinos idiomáticos del castellano en España son: Andalucía, Salamanca, Madrid, Barcelona y en el ámbito internacional destacan Méjico, Guatemala, Cuba y Ecuador
En Canarias los datos son más negativos, sólo representa el 0,07% de los turistas que eligen el archipiélago. Está claro que el aprendizaje del español, hasta ahora no ha figurado como un producto relevante en el proceso estratégico turístico de canarias. Durante 2006 se registraron sobre unos 7.000 turistas que nos visitaron para aprender nuestra lengua. Por islas Gran Canaria y Tenerife acogieron el 84% del total. Por orden se encuentra: 1º.- Gran Canaria: 44%. 2º.- Tenerife: 40%. 3º.- La Gomera: 7%. 4º.- Lanzarote: 5,3%. 5º.- Fuerteventura: 2,7%. 6º.- La Palma: 1%. En cuanto a la distribución de la demanda por la tipología del centro, los centros especializados en la enseñanza de español para extranjeros concentran el 75% del total de la demanda. Otro dato desfavorable es el bajo porcentaje que acogen nuestras universidades, siendo solamente de un 9%.
¿Cuál es la procedencia de estos turistas? En primer lugar, destaca la alta representación de los alemanes que llegan al 53%, en segunda posición se encuentran los británicos con el 11%, les siguen los escandinavos con un 5,3%, los suecos con el 2,7%, los italianos con el 2,7% y los belgas 2%, entre otros. Con estos antecedentes tenemos muy localizados los mercados emisores que prácticamente son los mismos que los del turismo tradicional hacia el archipiélago. Para promocionarlo, basta con incluir este nuevo producto, a los lugares donde llevamos yendo toda la vida. La edad media en Canarias es de 33 años, significativamente mayor que la media nacional que está en la horquilla de los 20 a los 30 años. Este tipo de turistas realiza una amplia gama de actividades a lo largo su estancia, entre las más destacadas se encuentran: las visitas a las diferentes localidades, ir a la playa, la gastronomía, visitar parques naturales, realizar excursiones, visitas culturales, a la vez tienen previsto como mínimo conocer otra isla. El principal motivo por el que escogieron las Islas Canarias fue por su clima. En cuanto a las fuentes de consulta para la elección del destino, destacan primero Internet como canal de información con un 40%, seguidamente de la recomendación de amigos y conocidos con un 36%.
El grado de satisfacción de los estudiantes con la oferta idiomática canaria es medio. Los aspectos mejor valorados son la calidad de los profesores y de las escuelas. Las debilidades más relevantes y a tener en muy en cuenta son: la escasa especialización en turismo idiomático. La mayoría de los cursos existentes se dirigen a turistas de larga estancia. Otro de los hándicap es la mínima oferta de cursos impartidos por las universidades. Los menores de 18 años no tienen ningún tipo de oferta. La distribución de los centros es poco homogénea y el nivel desigual. Hay un gran déficit de profesores especializados. Y es evidente que Canarias no se promueve como destino de Turismo Idiomático y carece de una estrategia de promoción y comercialización. Colateralmente nuestra imagen hierática es de un destino de sol y playa, con escasa falta de notoriedad cultural. A la vez hay un insuficiente aprovechamiento de la oferta complementaria en la oferta de los centros. Tenemos un déficit en alojamientos adecuados y especializados a precios razonables. Y los centros en su mayoría carecen de certificados de calidad. A todo este hay que añadir un estereotipo muy dañino para las Islas que es que “se habla muy mal el español”, eso dicen; y la competencia que hacen los destinos en España es muy influyente para no elegir este archipiélago.
No cabe ninguna duda que hay muy buenas oportunidades para este sector, la creciente demanda de estos cursos en los últimos años, así lo avalan. El español lleva un lustro de moda y existe un creciente interés por aprender nuestro idioma. Y en cuanto a las fortalezas que tiene Canarias está la clara reputación del destino, el formidable y favorable clima durante todo el año, la amplia oferta complementaria de calidad existente pero no usada en esta actividad y las buenas conexiones aéreas con los principales mercados emisores.
Nuestro objetivo debe ser aumentar los ingresos por este tipo de turismo y generar nuevas oportunidades de negocio y empleo, para ello habrá que aumentar el número de centros y posicionar nuestras islas como destino envidiable para un turismo idiomático. Todo ello pasa organizar y profesionalizar este sector desarrollando una oferta atractiva y seguidamente comercializando y promocionando en grandes dosis. A esta realidad se le ha prestado nula atención como a otras tantas y ello nos ha llevado a no existir en un nicho de atracción de economía en diferentes escalas.