Siete días en tren por Austria

La Austria inspiradora: mucho más que un simple trayecto en tren

Viena: Metrópoli de la música

Clásicos mundos musicales, el murmullo del vals y la audible cultura de las cafeterías

Viena no es solo uno de los centros de música clásica más conocidos del mundo, aquí la música clásica también se vive como en ningún otro lugar. Cada noche, 10.000 amantes de la música escuchan música clásica en directo; un número increíble. A lo largo del año, el calendario de conciertos de Viena presenta más de 15.000 espectáculos de todos los géneros y tamaños.

Una de las casas de música más grandes de la ciudad es la Ópera Estatal de Viena. Un vistazo entre bastidores permite descubrir la inmensidad de esta ópera: en un recorrido de aproximadamente 40 minutos, aprenderá más sobre la historia de este lugar, su arquitectura y su puesta en escena.

También puede realizar este recorrido por las salas del Musikverein de Viena. Si no consigue acudir a uno de los codiciados conciertos de música clásica, puede visitar el singular museo sonoro de Viena, la Casa de la Música. Aquí, como director virtual, puede dirigir la Filarmónica de Viena o, al menos, su proyección en vídeo.

Podrá escuchar los vals de Johann Strauss en un concierto de piano en directo con una dulce compañía (tarta de manzana Apfelstrudel, pastel Gugelhupf o tarta Sacher) en uno de los numerosos cafés de concierto de Viena. Un buen ambiente al compás de tres por cuatro.

Linz: un impulso a orillas del danubio

Cultura sobre los tejados, un colorido y bullicioso puerto, e islas gastronómicas en la ciudad

Duración del trayecto Viena–Linz: 1 h 15 min

Con su diversa e innovadora oferta cultural, la ciudad de Linz, a orillas del Danubio, muestra de forma impresionante la fusión de las distintas culturas, estilos y medios audiovisuales, así como su orientación hacia el futuro. Tanto en el Ars Electronica Centre, la universidad de arte o en las propuestas expositivas de Lentos: hace tiempo que Linz ha pasado de ser un destino desconocido a una visita obligada. Una experiencia especial le espera en el tejado de la Offenes Kulturhaus, cuyo nombre se abrevia como OK. Desde 2009, cuando Linz fue la capital de la cultura, hay un recorrido artístico llamado Höhenrausch sobre los tejados de la ciudad. Artistas internacionales presentan sus obras de arte en este inusual espacio de exposición. Entre ellas se encuentra un gigantesco barco de vela flotante, de 20 metros de largo y 17 metros de altura. Una torre de madera de 86 metros de altura se convierte en el mástil del barco. Si no tiene vértigo, podrá trepar por la torre y ser recompensado con unas fantásticas vistas.

En la zona del puerto, directamente a orillas del Danubio, no es menos espectacular. Con Mural Harbor ha surgido en Linz la galería de grafiti más grande del mundo. Más de 100 obras de grafiti de artistas de 25 naciones aportan color a los edificios de varios pisos en la galería al aire libre del puerto. Y la mejor forma de admirar estas obras de arte es desde un barco.

Recomendación: para una pausa cultural, hay algunos lugares excepcionales en el casco antiguo de Linz, como una panadería (Naturbackstube Honeder, Spittelwiese 15), que parece una tienda de diseño, y un restaurante (HORST Wohnküche, Mozartstraße 19) donde se sentirá como en el salón de su casa.

Salzburgo: el centro de la elegancia señorial

Castillos de cuento de hadas, floridos jardines y románticos escenarios de película

Duración del trayecto Linz–Salzburgo: 1 h 15 min 

La historia de los palacios más grandes y famosos de Salzburgo se remonta a la época de los príncipes-arzobispos de los siglos XVII y XVIII. El Palacio Hellbrunn y el Palacio Klessheim fueron construidos como palacios de placer para el entretenimiento y la diversión, mientras que el Palacio Mirabell fue el hogar de la amante de Wolf Dietrich, Salome Alt, y sus hijos. La Sala de Mármol del palacio, que antaño fue el salón de baile del príncipe-arzobispo, hoy en día está considerada como uno de los salones de bodas más bonitos del mundo. En esta sala han tocado Leopold Mozart y sus hijos Wolfgang y Nannerl. Los jardines de Mirabell son un hallazgo particularmente precioso: además de esculturas, fuentes, rosales ornamentales y flores coloridas, hay un teatro al aire libre rodeado de setos y un jardín de enanos. Veintiocho enanos de mármol de Untersberg pueblan el jardín de enanos más antiguo de Europa.

Los jardines del palacio también son una verdadera estrella de cine: además de la escuela de equitación Felsenreitschule y la Abadía de Nonnberg, los jardines de Mirabell son uno de los escenarios más importantes del famoso musical de Hollywood Sonrisas y lágrimas.

Recomendación: si le interesa la época de los príncipes-arzobispos, la exposición permanente en los suntuosos salones del DomQuartier de Salzburgo ofrece una visión de lo más interesante.

Hallstatt en la región de Salzkammergut:
una excursión de lo más pintoresca 

Patrimonio mundial de la UNESCO, hallazgos prehistóricos y oro blanco

Duración del trayecto Salzburgo–Hallstatt: 2 h 30 min

Una excursión cerca de Salzburgo merece un breve desvío. En tren, solo tiene que salirse de la línea principal de este a oeste y dirigirse hacia el sur. El municipio de Hallstatt en el lago de Hallstatt se encuentra en la Alta Austria y, junto con la montaña Dachstein y la región interior de Salzkammergut forma parte del Patrimonio mundial de la UNESCO. Las atracciones más importantes para los visitantes son su idílica ubicación, con sus casas parcialmente construidas con palafitos en el lago, las cuevas Dachsteinhöhlen de Obertraun y el mundo salino Salzwelten Hallstatt. Aquí se encuentra la mina de sal más antigua del mundo. Y es aquí también donde la historia cobra vida al dirigirse hacia los profundos túneles subterráneos con las carretillas transportadoras de sal y descubrir la escalera de madera más antigua de Europa (prehistórica). Hace aproximadamente 3350 años, sirvió a los mineros de Hallstatt como camino hacia un arduo trabajo. En una visita guiada podrá descubrir a través de los mineros lo difícil que era la vida en aquella época, cómo llegó la sal a la montaña y cómo la región de Salzkammergut estuvo sumergida en el mar durante millones de años. Gracias a la sal, también llamada "oro blanco", la región se hizo muy rica y es de ahí de donde procede su nombre. Hasta la fecha, se sigue extrayendo la famosa sal de roca de la montaña.

Recomendación: se requiere un calzado resistente y ropa de abrigo para realizar la visita a la mina de sal. La temperatura en la montaña se mantiene constante a unos ocho grados centígrados durante todo el año.

Lago Achensee: un retiro en las montañas

Aventura en el tren de la nostalgia, un paraíso natural escondido y cultura en el valle

Duración del trayecto Salzburgo–Jenbach: 1 h 30 min

De vuelta a la línea principal, puede seguir su camino de Salzburgo a Jenbach, y en Jenbach hacer un transbordo al ferrocarril Achenseebahn, un tren nostálgico que recorre el trayecto entre el valle Inntal y el lago Achensee. Este tren realiza un gigantesco esfuerzo, ya que debe superar 440 metros de desnivel.

Construido en torno a 1889, es el más antiguo de su tipo en toda Europa y fue muy importante para la región desde el principio. La época del ferrocarril Achenseebahn y la compañía naviera Achenseeschiffahrt marcó el inicio del turismo en el lago Achensee. Ya entonces los visitantes apreciaron la facilidad de acceso y la fascinante belleza del lago Achensee, donde las montañas de Karwendel y http://www.rofanseilbahn.at/sommer llegan hasta sus orillas. Desde el barco tendrá las mejores vistas del paisaje. Si abandona el barco en Pertisau, puede ir caminando directamente al valle Falzthurntal en el Parque Natural de Karwendel, que para muchos sigue siendo un paraíso natural escondido y que junto con el hotel Gramai Alm forman el lugar de retiro perfecto.

Recomendación: de vuelta al valle Inntal, si tiene tiempo puede visitar el castillo Tratzberg. Construido con un estilo renacentista, impresiona por su imponente estructura, un patio magníficamente pintado, y la preciada y artística decoración de las habitaciones.

Innsbruck: la capital de los alpes

Una arquitectura brillante, unas impresionantes vistas de las montañas y una gastronomía de altos vuelos

Duración del trayecto Jenbach–Innsbruck: 20 min

Si no ve Innsbruck desde arriba, solo visitará una parte de la ciudad. Dado que las montañas también forman parte de Innsbruck, su ubicación en medio de los Alpes invita a realizar una excursión a la gran montaña local, la cordillera Nordkette. Puede acceder fácilmente en remonte de montaña. No muy lejos del Goldenes Dachl (tejado dorado) se encuentra la futurista estación del funicular Hungerburgbahn. En 2007, la arquitecta estrella Zaha Hadid diseñó las estaciones de modo que se asemejaran a glaciares. Cuando luce el sol brillan como formaciones de hielo amorfas. El funicular pasa primero por un túnel, luego por encima de un imponente puente sobre el río Inn y, finalmente, con una pendiente del 46 % sube hasta la estación Hungerburg, ubicada a 806 metros sobre la ciudad. Desde allí puede subirse a la telecabina panorámica hasta la estación Seegrube, a 1905 m s.n.m., desde donde se puede contemplar todo el valle central del Inntal, los Alpes de Stubai y Zillertal, el valle Wipptal y la frontera con Italia. Aunque aún no ha llegado a la cima, aquí ya le espera una gastronomía de altos vuelos: el restaurante Seegrube sirve una excelente comida. Si desea ir más arriba, súbase al teleférico Hafelekarbahn, que le conducirá hasta el Hafelekar a 2256 m s.n.m.

Recomendación: el zoológico alpino de Innsbruck se encuentra de camino a la estación de Hungerburg. Este zoológico reúne una enorme variedad de especies alpinas: es el hogar de unos 2000 animales (150 especies), entre ellas, las cabras montesas, las gamuzas y los corzos que habitan en las montañas, así como marmotas, liebres de montaña y águilas.

Bregenz: una ciudad de festivvales junto al lago

El escenario flotante más grande del mundo, una experiencia de senderismo gastronómica y un retiro junto al lago

Duración del trayecto Innsbruck–Bregenz: 2 h 30 min

La ciudad de Bregenz se encuentra directamente en el lago de Constanza y tiene su propio festival: el Festival de Bregenz. Desde 1946 forma parte de la historia de la ciudad. Bregenz también ofrece una atracción cultural única con el escenario flotante más grande del mundo. En julio y agosto, se celebran más de 80 espectáculos haga el tiempo que haga, y alrededor de 200 000 visitantes escuchan ópera al aire libre.

Las mejores vistas de la ciudad y del magnífico paisaje pueden contemplarse desde el Pfänder, la montaña local de Bregenz. En apenas seis minutos, el teleférico Pfänderbahn le lleva del casco antiguo a más de 1000 m s.n.m. La ruta del queso, situada a una imponente altura, conduce desde la estación de montaña hacia una experiencia gastronómica única en Austria: doce paneles explican a los excursionistas las múltiples tareas y vínculos de la agricultura con las especialidades de queso, que son tan importantes para Vorarlberg.

De vuelta al valle, la cocina regional le impresionará con sus exquisitas especialidades. El restaurante Gasthaus Kornmesser no solo ofrece una cocina de alto nivel, sino que también alberga la última cervecería típica de la ciudad con una gran terraza arbolada, donde los castaños todavía murmullan como en los viejos tiempos.

Recomendación: los escalones Sunset-Stufen y el muelle Fischersteg son el mejor lugar para contemplar unas puestas de sol inolvidables. Durante los meses de verano encontrará aquí el Sunset Bar. Una refrescante bebida con vistas al lago es la manera perfecta de terminar un día lleno de experiencias.